Ahí estás otra vez
Siento tu presencia muy cerca de mi
Eres como un fantasma, que me sigue a todos lados
Asfixiándome con recuerdos de aquel pasado que perdí.
Es ese frío que arrastras a mi vida
Son esas lágrimas que tanto he desperdiciado
Todos aquellos sueños que tu has marchitado
Hoy viven en mi impidiéndome el olvido.
Veo como te ries cada instante que me haces caer
Brindándome la inspiración de escribir todos mis versos
Ahora regresas a mi para que no pueda esconder
Este terrible sentimiento que impones en mi pecho.
¿No te da lástima lo que has hecho de mi?
Yo si siento pena cuando me veo en el espejo
Pues no veo la inocencia que alguna vez sentí
Solo pupilas cansadas de ver tanto sufrimiento.
Y que decir de la inmensidad de este silencio
Es el complemento perfecto para la desesperación de cada día
Agobiando cada momento en el que reinas en mi pensamiento
Siempre encuentras la manera de dejarme sin salida.
Ya me estoy acostumbrando a la insatisfacción que tu me causas
el dolor se ha quedado, siempre aquí como un amigo
Estando cada instante en el centro de mi alma
A lo mejor no estoy tan sola, el siempre está conmigo.
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