Lo soñé,
por un momento me confundió bastante,
el pensar que al ser mío, nunca te había perdido,
mas eras solo tú confeccionando tu arte.
Dibujaste mil heridas en un corazón sincero,
tallando tu rencor en lo más profundo de mi ser,
plasmaste un rostro de amargura en blanco y negro,
borrando el color de lo que fui alguna vez.
Esculpiste la figura de mi desaliento,
moldeando cada parte de mi felicidad,
hasta crear una escultura en honor a la melancolía,
a la que rindes tributo con tu insensibilidad.
Compusiste tantas melodías sobre mi sufrimiento,
interpretando las canciones de tu lejanía,
escribiste varios poemas por todo el desprecio,
con las frases pedantes que tanto sabías.
Y aquí me encuentro yo pensando en un mundo,
en donde me toque demostrar el talento,
mi singular expresión a la hora de amar
inspirada en la inmensa pasión que siento.
Inventar una pintura plasmando mi entrega,
crear canciones sobre todo mi afecto,
colorear la pureza que se ha desperdiciado,
desde el momento en que por ausencia, tú has brillado.
Sin embargo, la ilusión se ha decolorado
las esculturas del pasado están desplomadas,
el sentimiento que hubo un día se ha desgastado,
a falta de artistas que mezclen esperanzas.
0 comentarios:
Publicar un comentario