Nuestra rutina

¿Cómo puedo ocultarlo?
No te imaginas lo gigantesco que es
Solía ser un capricho desesperante
pero ahora se ha vuelto el más inmenso querer.
Se nota cuando me miras
el fuego que desatas en mi interior
esas ansias de tenerte
y de apoderarme de tu amor.
Aunque nadie más lo crea
pues no lo pueden entender
es que es muy complicado
lo más simple que nos pudo suceder.
Con tan solo saludarme
provocas que mi sentir crezca
la luna ya no es tan distante
alejas todas las tormentas.
No, no puedo esconderlo
sabes que es mi verdad
que hoy por ti estoy muriendo
es mi única realidad.
Sabemos que no se puede
hacer esto parte de nuestras vidas
mas es tan gratificante
el sonreirnos a escondidas.
Una mirada que nos quema
junto a una sonrisa que ilumina
un silencio bien incómodo
del amor, nuestra rutina.