El niño que yo amo es un ser maravilloso,
posee la mirada más tierna que en la vida he contemplado
y una sonrisa que inunda mi mundo de tranquilidad.
Estar entre sus brazos me basta para sentirme segura
junto a él no le temo a nada
es todo lo que había soñado
si lo tengo nada me falta.
Vive diciendo tonterías buscando mi sonreír
su mayor satisfacción está en verme feliz.
Un día me regala una rosa,
diciendo que su belleza es opacada al estar cerca de mi,
en otro momento me dedica una canción
que le recuerda lo mágico de que seamos los dos.
Aprecia cada una de mis virtudes,
mis defectos le causan inspiración
pues aunque sabe que no soy perfecta
el me ama tal y como soy.
Cuando me presenta ante sus amigos
solo con sonreír ellos saben que soy yo
la niña que tanto el añoraba,
la dueña de su corazón.
Me mira a los ojos y sabe si miento
comprende que representa cada uno de mis gestos
como el no me conoce nadie
pues lo que siente es puro y sincero.
Si, es él quien habita en mis sueños
el exclusivo propietario de todo mi amor
demasiado bueno para ser cierto
por eso solo ronda los senderos de mi imaginación.
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